VOLAR EN TIEMPOS DE LA COVID-19


Nombre completo: Oneka Salazar Molina
Compañía y cargo: F/O Boeing 737 SWIFTAIR


¿Cual es tu experiencia Aeronautica y cuanto llevas en la compañia? 
Tengo algo mas de 5000 horas y llevo 7 años trabajando en Swiftair

¿Estas basada en ESP? ¿Teneis Informacion sobre COVID-19 en vuestra base? ¿Y material de proteccion?
Hace 5 años que  tengo base en Vitoria- Gasteiz. Desde la compañía recibimos información sobre las nuevas normas de higiene, y sobre la evolución de la pandemia. Si, tenemos material de protección y se han cambiado algunos procedimientos para mantener la distancia social.

¿Que medidas de proteccion estais tomando? 
Desinfectan todos los dias los aviones, llevamos mascarillas, guantes y gel.



¿Estais volando a Zonas de riesgo? 
Podemos considerar Vitoria como riesgo? Fue uno de los primeros focos, y hasta hace unas semanas hacíamos el vuelo a Bérgamo.


¿Como esta el espacio aereo? 
Desierto, en silencio, con algún avión de vez en cuando, y con grandes directos. La sensación es muy rara.


Diferencias en la operativa desde COVID-19 
Nos han cambiado algunas rutas para adecuar el tamaño de los aviones a las nuevas necesidades, y algunos destinos.


En esta situacion, ¿Como es un dia a dia de un Piloto?
Hoy es un día de vuelo como tantos otros pero todo es diferente, me he levantado muy muy pronto, como todos los lunes que me toca volar a Valencia, los pilotos de carga volamos prácticamente siempre de noche, estamos acostumbrados a salir de casa cuando las calles están aun por poner, de esta manera la mercancía llega a destino a primera hora, a tiempo para quien empieza a trabajar o para quien esta deseoso recibir ese paquete que encargo ayer y que espera abrir durante el desayuno o cuando vuelva de dejar a  los niños en el cole, pero hoy todo es diferente, la mayoría de esos receptores  no tienen prisa ni por llegar a la hora al trabajo, ni por llevar los niños al cole,  simplemente porque la oficina y el cole se han instalado temporalmente en el salon de casa.

Aparco el coche y ando unos metros hasta el control de seguridad, al levantar la mirada me encuentro un cartel que reza “ entren al filtro de uno en uno”, oyes una voz que te dice al entrar que antes de tocar nada, y aunque lleves guantes,  que utilices el dispensador automático de gel que han instalado al lado de la puerta, el personal de seguridad te conoce porque has pasado por allí mil veces en los últimos años, su trato sigue siendo cercano pero ves que te siguen con la mirada como intentando evitar que toques cualquier superficie.

Sales del control y ya esta Charly esperándote para ayudarte con las maletas como siempre,  pero hoy viene enfundado con una mascarilla, guantes  y reteniéndose para no darte dos besos como todas las mañanas, dichoso distanciamiento social. Una vez en la furgoneta y convenientemente separados comentamos las figuras finales y las incidencias que se han producido durante la noche.

A pie de avión nos reciben los mecánicos, habitualmente te dan el estado del avión y la revisión completada, hoy además nos ofrecen guantes, mascarillas y gel. Sobretodo el gel es el nuevo extra que parece que ha venido para quedarse.

Entras en la cabina, sabes que el nuevo procedimiento de los mecánicos es desinfectar los aviones cada día pero aun así no puedo evitar empapar una toallita en gel y pasarla  por las superficies que voy a tocar durante mi jornada laboral ( de aquí va a salir algún TOC seguro). 

Mientras preparamos el vuelo da los buenos días Ramón, hoy desde la puerta para mantener la distancia. Llevo años trabajando con el, he compartido muchas risas alrededor de una buena mesa y hoy me toca intuir que esos ojos risueños van acompañados de una sonrisa que no veo porque esta tapada con una mascarilla, nos comenta los tiempos de carga y se va. Vuelves a tener la sensación de que todo es igual pero diferente.

Se cierra el avión, arrancamos motores y nos vamos al aire como todos los días, pero hoy tu mano, en un acto casi reflejo,  se va automáticamente al selector de volumen de la radio una y otra vez, para comprobar que no fallan las comunicaciones, el silencio durante el crucero es muy poco habitual, en ese momento eres consciente de lo drásticamente que  se ha reducido el trafico aéreo,  por temprano que sea, sabes que estas horas en situación normal, compartes espacio aéreo con los que vienen de cruzar el charco, con los vuelos de pasaje mas madrugadores... Hoy en Madrid control solo 4 indicativos y tres son de mi propia compañía.

Hemos aterrizado en Valencia, la imagen de la terminal de pasajeros es dantesca, las luces apagadas, prácticamente todos los aviones aparcados en remoto, y ni un solo movimiento en la plataforma.

Jota , también pertrechado con guantes y mascarilla, recoge la documentacion del vuelo desde la puerta y como todas las mañanas te saca una carcajada con algún comentario gracioso, si en cualquier momento se agradece el buen humor, hoy todavía mas en estos  tiempos difíciles que nos tocan vivir.

Nos dirigimos al único hotel que hay abierto en la ciudad, precisamente para trabajadores en actividad esencial, toca descansar lo que se pueda porque esta noche nos quedan tres saltos mas antes de llegar a casa sobre las seis de la mañana.

De vuelta a Foronda, al abrir la puerta veo a Iratxe, ella pertenece al personal de tierra, maneja como nadie todos los vehículos que dan asistencia al avión, es una trabajadora incansable siempre de buen humor, pese a que nos conocemos desde hace muchos años nuestro saludo ahora se limita a acercar un codo. Definitivamente hoy es un día  como otro cualquiera pero muy diferente.




¿Como ha sido el ultimo vuelo? ¿Alguna experiencia emotiva que puedas compartir con nosotros? ¿Sabes que material llevabais? 
Aunque seguimos trasportando material sanitario, nuestro avión también  lleva a bordo, todas aquellas cosas que siguen haciendo falta en las casas y que no hay posibilidad de comprar todavía pie de calle. 

Respecto a la experiencia emotiva es una pena que no tenga una anécdota  concreta llena de emoción,  lo que os puedo asegurar es que desde mi humilde posición intento levantar el animo a quien de vez en cuando lo pierde, cambiarle el humor a quien tiene tendencia a enrocarse en una posición demasiado “nube negra”, porque todos tenemos un día con el animo mas bajo, lo importante es no tenerlo todos el mismo día.

Espero que muy muy pronto volvamos a las mañanas en las que si no tienes mucho cuidado pisas las comunicaciones de otros aviones, porque eso significa que volvemos a estar todos donde nos corresponde, surcando los cielos del mundo entero, hasta muy pronto!


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